En un contexto de fuerte tensión por reclamos salariales, el Hospital Garrahan oficializó la renuncia de Soraya El Kik a la presidencia del Consejo de Administración. Según informó la institución, la salida se debió a motivos de salud, aunque coincide con la falta de avances en la negociación con los gremios.
Este martes debía realizarse la segunda audiencia de Conciliación Obligatoria entre autoridades del hospital y representantes sindicales en la Secretaría de Trabajo, pero el encuentro fracasó por la ausencia de funcionarios del Gobierno nacional y directivos del centro de salud. “Le tiraron nafta al fuego”, expresó Alejandro Lipcovich, delegado de ATE, ante lo que calificó como una muestra de desinterés por parte de las autoridades.
En paralelo, la renuncia de El Kik fue interpretada por los trabajadores como un reflejo más del deterioro institucional. Desde ATE, apuntaron contra el Gobierno por la falta de propuestas concretas de recomposición salarial, y cuestionaron las condiciones laborales actuales: “¿Cómo podría sostenerse el principal hospital pediátrico del país con enfermeras ganando salarios por debajo de la línea de pobreza?”, señaló Lipcovich.
Frente a esta situación, el sindicato confirmó la continuidad del plan de lucha, que incluye una movilización desde el Obelisco hasta Plaza de Mayo. Además, en los próximos días se realizará una nueva asamblea para definir los pasos a seguir.
La conducción del Consejo de Administración será asumida por la Dra. Mariel Sánchez, médica pediatra con larga trayectoria en el Garrahan desde 1993, donde se desempeñó como Directora Médica Ejecutiva. Según el comunicado oficial, la nueva presidenta continuará los lineamientos de su antecesora, con foco en la eficiencia, el ahorro genuino, la transparencia y el fortalecimiento del mérito profesional por encima de los intereses políticos.
